El aumento de los precios de los alimentos ha llevado a los agricultores a incrementar la siembra de cereales y semillas oleaginosas, pero se pronostica escasez de suministros hasta 2024 debido a factores como el fenómeno climatológico de El Niño, restricciones a exportaciones y mayor uso de biocombustibles. Aunque se prevén pérdidas en los precios mundiales de trigo, maíz y soya en 2023, persisten vulnerabilidades ante crisis de oferta e inflación de alimentos. El Niño continuará hasta el primer semestre de 2024, afectando la producción agrícola en diversas regiones. La producción asiática de arroz podría disminuir, afectando los suministros ya mermados en 2023. La próxima cosecha de trigo en India enfrenta amenazas por la falta de humedad. China otorga licencias para semillas de maíz y soya transgénicos a 26 empresas, allanando el camino para la siembra comercial de estos granos.
Fuente: La Jornada
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