El sector primario en México enfrenta una crisis multifactorial, donde políticas públicas inadecuadas y cambios climáticos extremos agravan el abandono de actividades esenciales, como la ganadería. Este subsector, afectado por la sequía, ve disminuida su producción de forraje, indispensable para establos y pastoreo. La problemática no se limita solo a la producción; la supervivencia de las micro, pequeñas y medianas unidades económicas ganaderas se ve amenazada, poniendo en riesgo el bienestar de las familias rurales que dependen de ellas. Se requiere una intervención pública enfocada en la sostenibilidad y resiliencia, para asegurar la viabilidad de estas comunidades y de su invaluable labor productiva.
Fuente: .ganaderia.com