La matriz energética de América Latina se basa principalmente en hidrocarburos, con 34 % de gas natural y 31 % de petróleo. Sin embargo, la región enfrenta desigualdad en el acceso a la energía, con 10% de la población (65 millones de personas) que no alcanzan a cubrir sus requerimientos energéticos básicos. La crisis energética en México se caracteriza por una combinación de factores estructurales, institucionales y políticos que han llevado a una situación de desabasto y escasez de energía eléctrica y petrolera.
Fuente: Uno más uno